Una de las mejores formas que he encontrado de manejar el estrés y la frustración de Covid, la guerra, la inflación, la política y las noticias catastrofistas es tener una vía de escape adecuada. Me gusta viajar y buscar nuevas experiencias. Los lectores de este blog saben que he estado en varios parques nacionales locales, así como en diferentes faros. El fin de semana pasado, encontré una nueva experiencia en Miami.
Buscando una oportunidad para esta escapada local, mi familia y yo visitamos el Zoo de Miami. ¡Qué gran decisión! Hacía años que no iba y una vez que entras en el zoo, las noticias, la guerra, la política, etc. se desvanecen.
Aunque hacía calor, fue una elección maravillosa. El zoo en sí tenía muchísimos visitantes, pero no parecía abarrotado. Fue muy agradable ver a muchas familias juntas disfrutando de esta experiencia. Todos se comportaban bien y parecían pasarlo bien. Fue una experiencia sin estrés, sin preocupaciones por lo que se oye en las noticias.
Los padres estaban tan entusiasmados como sus hijos por presentarles a los animales y tal vez ver una actuación suya. Los niños estaban encantados y la oportunidad de dar de comer a las jirafas fue un gran éxito, al igual que el miniparque acuático.
Para mí, fue como unas minivacaciones. Las preocupaciones e inquietudes cotidianas desaparecieron al menos durante unas horas. Fue un placer estar rodeada de gente cortés, amable, que quería disfrutar y disfrutó de una experiencia familiar positiva.
Florida parece tener muchas aventuras si uno se limita a mirar.
El Zoo de Miami fue una de estas aventuras y mereció la pena el viaje.
