Tuve que apagar las noticias.

20 de junio de 2020

He tenido que apagar las noticias. No es que lo deseara, pero lo que veía me disgustaba bastante. No importaba el canal de televisión que viera. Me parecía que todo eran malas noticias y repetitivas. Las noticias se presentan de tal manera que avivan nuestros miedos y preocupaciones. Ahora me informo leyendo en Internet diferentes fuentes de noticias y puedo controlarlas. Cuando vemos las noticias por televisión, somos un público cautivo. Podemos cambiar de canal, pero vayamos donde vayamos, recibimos más de lo mismo. En todo el mundo ocurren cosas malas a la gente que, en su mayoría, no nos afectan. Sin embargo, lo vemos. Los comentaristas parecen amables y preocupados, pero ¿lo son de verdad o sólo son lectores de noticias?
Me pregunto qué ha pasado con nuestra capacidad de pensar con claridad y tomar decisiones basadas en información precisa. Parece que, en lugar de periodismo imparcial, los telediarios son ahora más de entretenimiento que informativos. Parecen tener el poder de establecer el contexto y, con su elección de cobertura, definir un punto de vista y afirmar que representa a la mayoría de la gente. Pero, ¿realmente lo hacen? Si vemos las cosas de otra manera, ¿estamos en minoría?
¿Ver los telediarios, sea cual sea la emisora, nos hace renunciar a nuestra capacidad de pensar por nosotros mismos? ¿Hemos permitido que otros tomen nuestras decisiones por nosotros inflamando nuestros miedos? ¿Hemos permitido que las agencias de noticias controlen la información que recibimos y nos guíen para que aceptemos sus mensajes?
¿Nos hemos dejado atontar?
¿Qué te parece? Envíame tus comentarios.