Todos los veranos aprovecho para viajar. Ir a Europa ha sido uno de mis viajes favoritos y lo llevo haciendo desde mi época universitaria.
Sin embargo, desde la pandemia, las cosas han cambiado. No sólo les preocupa enfermar en un país extranjero, sino que ahora les preocupan los vuelos, las normativas, la inestabilidad política, la inflación y el acceso a exposiciones y lugares que visitar.
Antes era fácil reservar un vuelo y hacer una reserva de hotel e irse sin más. Puede que siga siéndolo, pero leer sobre los problemas de las compañías aéreas, las normas de Covid y la seguridad general en distintos países me parece que hace que viajar sea mucho más difícil. Puede que no lo sea, pero yo lo percibo así.
He viajado dentro de Estados Unidos a medida que la pandemia disminuía y he disfrutado de estos viajes. También he hecho viajes mucho más agradables dentro del estado de Florida. Sin embargo, viajar fuera del país me permite ver cómo viven los demás y conocer algunas civilizaciones milenarias.
Covid ha cambiado mucho para todos nosotros. Con los cierres y las cuarentenas, nos han sacado de nuestras rutinas habituales y es difícil volver a ellas. Hay mucha más incertidumbre y problemas potenciales que antes, aunque probablemente todos sean manejables.
(Normandía Francia)
Es mi perspectiva la que ha cambiado y ésta es una de las consecuencias de la pandemia. Volver a viajar al extranjero requerirá más esfuerzo y una nueva perspectiva. Sin embargo, esto puede ser realmente positivo, ya que podría aumentar la apreciación de los lugares a los que viajo y de lo que experimento.
Permanece atento.
